PRINCIPIO DE VIBRACIÓN: NADA ESTÁ INMÓVIL, TODO SE MUEVE; TODO VIBRA

Esto significa que en el Universo donde vivimos no existe nada que sea totalmente firme o estable. Todo se encuentra en un continuo movimiento, una continua vibración y transformación. Cada parte del Universo tiende a transformarse en algo mejor, evoluciona hacia un nuevo nivel de existencia. En nuestro orden personal, la vida nos empuja siempre a vivir de una manera mejor. Las crisis aparecen cuando permanecemos rígidos o inflexibles en una posición. Cuanto más cerrados estemos en una posición o idea, más fuerte será el esfuerzo que hará el Universo para movernos de allá. Por eso es que la gente sufre fuertes crisis y luego cambia. Algunas personas necesitan pasar por enfermedades, accidentes o pérdidas para darse cuenta del valor que tienen ciertas personas o su propia vida. Hay otras personas que caen en la inercia y no toman decisiones; cuando eso ocurre, el Universo mismo toma decisiones por ellos. De acuerdo con el Principio de Vibración, "debemos aprender a prepararnos para los cambios en la vida". Según este principio si tiendes a aferrarte a una vivienda, una pareja, un trabajo, una amistad, o a cualquier objeto que te da seguridad, lo más probable es que tarde o temprano sufras. Porque en el Universo no existe nada que se encuentre inmóvil. Esto no significa que tendrás que quedarte sin vivienda, familia, trabajo o pareja; sino que lo que hoy estás viviendo no se repetirá en el futuro. No hay manera posible de repetir el pasado. Existen parejas que, después de haberse separado, deciden volver a estar juntos con la intención de ser como antes. Esto es un camino seguro a la frustración. Es posible que la reconciliación los lleve a vivir una mejor relación que la del pasado, pero nunca igual. En el Universo existen tres niveles elementales de vibración: baja, media y alta. De acuerdo con nuestro nivel vibratorio personal, estamos situados en algunos de estos tres escalones y, como consecuencia, atraemos las cosas de dicho nivel. La depresión, la angustia, el miedo, las enfermedades y todas las emociones más negativas nos llevan a vibrar en el nivel más bajo. Mientras una persona se mantenga "vibrando bajo" solo atraerá a su vida a personas o situaciones que aumentarán su malestar. En el nivel de vibración medio aparecen las soluciones y la vida fluye. Los obstáculos y problemas son más fáciles de resolver y la persona que se encuentra en esa vibración siempre muestra una actitud optimista hacia la vida. El nivel de vibración más alta corresponde a la de la Iluminación, la paz y el amor perfecto. Aquí no existen problemas, miedos o enfermedades. Cuando uno vibra en este nivel, lo que uno piensa se manifiesta inmediatamente. El reconocimiento del poder personal es total y absoluto y, por lo general, se lo utiliza para servir a la humanidad. La preocupación complica la solución de un problema porque baja el nivel vibratorio. Desde el punto de vista metafísico, la preocupación puede ser muy dañina porque aumenta la fe en lo negativo y agrava el problema. La mejor manera de ayudar a una persona es "ocuparse" de ella para que mantenga la fe bien alta y piense en la solución feliz del problema. NO HAY QUE PREOCUPARSE, HAY QUE OCUPARSE. El miedo es la fe en lo negativo. Para elevar el nivel vibratorio se deben utilizar pensamientos positivos. El primer paso es CANCELAR el miedo, repitiendo "cancelado" en voz alta, por lo menos tres veces. Luego se debe repetir alguna AFIRMACIÓN POSITIVA. luego debe VERSE ASÍ MISMA feliz y SENTIRSE FELIZ. La Palabra tiene poder creador. Cuando nos quejamos de algo solo estamos afirmando más el problema.


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